La Ciencia y sus Demonios

El próximo jueves 15 de noviembre se pretende protestar contra el proyecto de Ley Educativa que está confeccionando el gobierno, y que eliminará contenidos de humanidades. Para ello se debe escribir un Tweet (“pipiato”) en latín o griego añadiendo el hashtag #pipiatioclassica.

Parece que el amor por la cultura no vive su mejor momento. Hay un vaciado de contenidos en la enseñanza que afecta por igual a las ciencias que a las humanidades. La nueva Ley Educativa que está diseñando el equipo del ministro Wert sigue en esa línea, aligerando los temarios y eliminando asignaturas. Una de las disciplinas que se verá afectada es humanidades, con la desaparición de la Cultura Clásica de la ESO, y la no obligatoriedad del griego, ni tan siquiera en la modalidad del bachillerato de humanidades.

Las humanidades recogen el conjunto de nuestra cultura, de nuestra lengua, de nuestras tradiciones y nuestra historia. Sirven para entender lo que somos y para establecer los mecanismos de comunicación con nuestros semejantes. Estamos en un blog donde se realiza divulgación científica, y precisamente por ello entendemos que las humanidades tienen una enorme importancia, también en el mundo de las ciencias.

En primer lugar porque existen disciplinas científicas dentro del campo de las humanidades. La historia, la antropología o la lingüística emplean el método científico, tal y como hace la biología o la geología, para establecer sus teorías. En segundo lugar porque las lenguas clásicas han establecido el armazón que articula el lenguaje científico. La nomenclatura taxonómica es una discípula aventajada de Linneo, quien estableció el nombre de los géneros y de las especies en latín. Esta lengua, ya desaparecida, permite que cualquier habitante del planeta emplee el mismo nombre para referirse a un organismo, por mucho que éste tenga tantas acepciones como idiomas existen en el mundo. De igual manera, la inmensa mayoría de los términos científicos o médicos derivan del griego. Todos médicos saben en qué consiste la especialidad de la oftalmología. De igual forma, alguien con conocimiento básico de griego deduce que oftalmología deriva de oftalmós, que en griego significa “ojo” y de lógos que significa saber o razonamiento, con lo que todo unido debe significar el saber o estudio del ojo. Como este pequeño ejemplo, se derivan todos los términos que empleamos a diario, en muchas ocasiones sin ser conscientes de ello.

Para reivindicar la necesidad de mantener las humanidades en el currículo educativo se anima a que el jueves 15 de noviembre se escriba en Twitter una Pipiatio Classica, un tweet en latín o griego (quien no los domine puede usar traductores on-line, como el de Google). Añade a tus tweets el hashtag #pipiatioclassica para poder seguir el evento desde AQUÍ. ¡Ave Humanitates!